Agraciadamente contamos con la imbecilidad del emisor, que desconoce totalmente la estipulación monetaria a la que se enfrenta con dicho término. Yo, al igual que ellos, ya tomé la palabra como sinónimo de aceptación, teniendo siempre de forma desfigurada e intrínseca una connotación puramente consumista que introduzco a modo de grito desconsolado de adorada neoacracia. Ya ha llegado el momento de decir las cosas claras, mi tiempo no tiene ningún valor, pero malgastarlo escuchando sandeces acababa por darme a entender que hasta merece hacer saber que podría tenerlo. Sí, VALE, muy bien, me parece perfecto, pero...¿me puedo ir?
El blog de lo políticamente incorrecto. El blog de lo pornográficamente erecto. El blog de lo caricaturizablemente converso. El blog, nuestro prostiputo blog.
Nada vale. Bueno, casi nada.
Agraciadamente contamos con la imbecilidad del emisor, que desconoce totalmente la estipulación monetaria a la que se enfrenta con dicho término. Yo, al igual que ellos, ya tomé la palabra como sinónimo de aceptación, teniendo siempre de forma desfigurada e intrínseca una connotación puramente consumista que introduzco a modo de grito desconsolado de adorada neoacracia. Ya ha llegado el momento de decir las cosas claras, mi tiempo no tiene ningún valor, pero malgastarlo escuchando sandeces acababa por darme a entender que hasta merece hacer saber que podría tenerlo. Sí, VALE, muy bien, me parece perfecto, pero...¿me puedo ir?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Claro...(Con puntos suspensivos, que también tiene su qué)
ResponderEliminarEsta chica debe haber entendido de lo que va esta entrada, porque yo no entendí una puta mierda.
ResponderEliminar