Hace tiempo leí que los dinosaurios tenían tetas. Bajo la sólida base de esa teoría me encuentro en indisposición de afirmar que éstos amamantaban a sus crías hasta los dos años, y que rumiaban.
Uno de cada diez estudios actuales me da la razón, los otros nueve se encuentran bajo la atenta, aunque amenazante mirada, de Stephen Hawking.
No hay comentarios:
Publicar un comentario